viernes, febrero 16, 2007

DESDE EL SUR



P r é s t a m o

Tomare prestado el mar y su todo
Me llevare los abrazos del viento
Acunare los vuelos de pájaro y me colgare de ellos
Y beberé, beberé sin fin
Esa luz brotando de todo
Para aquellos días en que ser humano soy
Y me habitan las humanidades todas.






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C l a r o d e L u n a

Me clava claro de luna
Cada tecla un sueño ido
La espuma que deja un sueño
Humedece las ventanas

El tiempo ya no tiene cuerpo
Nube que no vuelve
El horizonte sinfonía espectral
Callo mis murmullos con cada tecla que me clava

La ventana me acurruca inocente y compañera
Que no se detenga nada,
Que la música se imprima
en mis letras soñolientas


Me clava claro de lunaCada tecla un sueño ido…






La noche que me tiemblan las manos….

Busco las proximidades,
Cuando me abundan las periferias…
Busco las distancias disminuidas,
Cuando los cuerpos y las almas me son vedados.

Busco las miradas profundas y claras,
Los segundos dilatados hasta la saciedad,
Busco los principios
No me gustan los finales, pero los aprehendo.

Busco sentarme a mirar las olas
y auscultar sus cantos.
Busco la sabiduría de las piedras
y la noche de las ciudades

Busco la imperturbabilidad de los árboles
El instante del río ,la prestancia de la montaña

Busco la sonrisa presta y cotidiana

Busco al hombre en su identidad desnuda
Y a la mujer en su primera esencia
Busco los respetos y las entregas
Busco la palabra y el verbo consecuentes
Las promesas encontradas
Y las memorias resarcidas

Busco las risas de mi hija
Siempre,
Sus ojos en la noche,
Y en todos los despertares de mi vida.

Busco los trenes que llevan a todos los mundos
y atravesar una tarde perdida tomada de una mano
Busco las casas de juguete y los puentes viejos
Y caminar sin tiempo en medio de la ciudad flotante






Busco la caricia honesta y el tacto profundo,
Mientras afuera todo sigue funcionando
Busco un desenredar del pelo sobre las rodillas
Conversando de nada, inventándolo todo




Busco una sonrisa abrupta tras mis disparates
Una mirada cómplice tras mis palabras mas cómplices
Busco la proximidad de un beso con ojos abiertos
y descansar por fin en una mirada

Busco la penetración total entre susurros


Busco a los humanos vivos
y a los muertos en su humanidad
Busco la locura derramada sobre las cosas, sobre las vidas


Busco los orígenes y las trascendencias
Desentrañar mi historia y responder al mundo
Busco las casualidades
Y los descubrimientos sin fronteras

Busco la calidez de una ternura despistada
La fragilidad de una certeza
Y la certeza incólume de una fragilidad,
La compañía cómplice de la soledad.

Busco la pausa con sus pausas
Y La música de las músicas
Busco las hojas blancas
y busco sin tregua en las escritas.

Busco los otoños y los crepúsculos
Y las mitologías desenvueltas en los aconteceres
Busco la totalidad en cada parte
y cada parte en su totalidad







La orilla de los caminos, el otro lado de los lados

Busco entregarme en las entregas
Deshacerme en los cariños y desaparecer en las heridas


Busco deslizarme bajo la puerta y vigilar un sueño

Busco en la punta de los abismos
y en las ramas del raciocinio
Busco los equilibrios kaóticos
Y el kaos de los equilibrios.



Busco la intuición de las madres
Y la lentitud de los ancianos
Busco la inmediatez de los niños
La incondicionalidad distante de los padres.

Me busco entre letras
y Me quedo entre resabios
de atempolaridad abrumadora


Y Me quedo…

Me quedo en los ojos y en los abrazos
En los espacios limpios y llenos
Con la luz de una lámpara vieja
Y con las plazas de los barrios


Me quedo en el lenguaje
y los lenguajes me quedan

Me quedo con las historias simples
Y las vidas hechas a mano
Me quedo con los brebajes de los poetas
Y sí, me quedo con la maldita magia de los amantes


Me quedo con los lápices de madera
Y los cuadernos, libretas y muros mil veces rayados





Me quedo con las luchas de los pueblos olvidados
Y las vigencias de los hermanos originarios


Me quedo con los olvidados
Y el olvido de los despistados
Con los artistas del sueño y de la entraña
Con las bicicletas y la rueda de los destinos


Me quedo con las jaulas abiertas
Y los ermitaños, los incautos y los incuerdos

Definitivamente me quedo con los patios traseros
Con los ventanales y los balcones antiguos
Y me quedo con los parrones después de almuerzo.



Me quedo con los bancas vacíos de las estaciones
Y con los asientos a la ventana

Me quedo con los pies descalzos a cualquier hora
Y con las lluvias de todos los tiempos.
Me quedo con las nostalgias de invierno
Y las hamacas de primavera.

Me quedo Con gatos y perros
Y los pájaros en el cielo.

Me quedo con el rodoviario
El manicero el emporio, y la botica
Me quedo con los cuentos para dormir
Y con los afectos enteros.

Me quedo con los gritos de gaviota
y el olor de las caletas
Me quedo Con los ojos empapados
y la sonrisa en la punta de la lengua




Me quedo con la cama desecha
Y los cojines revueltos,
Me quedo con los espejos en el techo
y con las esculturas de arena.

Me quedo con la prontitud de los resuellos
Y con la totalidad de las perezas,
Me quedo con el ultimo segundo de los suicidas
Y con el primer aliento de las promesas

Me quedo con el canto de las ballenas
Y con el cacareo de las gallinas

Me quedo con la valentía del que tiembla
Y con el murmullo del que crea,
Me quedo con los muelles y los pescadores
Y otra vez con el ocio de los poetas.

Me quedo con lo posible de los imposibles
Y la lucidez de las locuras
Me quedo sin Dios y llena de espíritus
Y con las bellezas encubiertas.

Busco las búsquedas
Y Me quedo en las horas

La noche en que las manos me tiemblan.